Qué mejor que arrancar el día con un sabroso y nutritivo desayuno. Afortunadamente, cada vez son más las opciones en la ciudad para disfrutar de esta comida, la más importante del día, como un rey.

Cocu, en Palermo ofrece una opción de desayuno capaz de hacer que la gente salga a la calle temprano, incluso en el crudo invierno porteño. Esta boulangerie porteña, con verdadera impronta francesa, promueve, como un genuino canto de gallo francés urbano, su llamado matutino en forma de café orgánico bien espumoso y caliente, jugo de naranja exprimido, croissant, pan de chocolate, tostadas con panes variados y recién hechos, queso crema y mermelada casera.

En Cocu se respetan las técnicas tradicionales francesas en la elaboración de sus panes y croisants: amasado manual, masa madre natural, tiempo de levado prolongado, harinas orgánicas. La masa madre Cocu tiene 37 años y agrega a sus panes un sabor auténtico, mejorando su conservación.

Los Maestros panaderos, liderados por Morgan Chauvel, comienzan la elaboración de la baguette de tradición francesa 24 horas antes del horneado. Eso permite a los aromas desarrollarse hasta llegar a un gusto único. Las cocciones de se organizan en pequeñas tandas a lo largo del día, para que incluso antes del cierre, en Cocu se pueda comprar pan fresco igual al que se probó en el desayuno.